Con motivo del 17 de octubre, Día Mundial para la Erradicación de la Pobreza, la EAPN Región de Murcia realizó una serie de actividades tanto para visibilizar la situación de la exclusión en la Comunidad Autónoma como para plantear la necesidad de medidas que la combatan.
Antes de empezar con la narración de las actividades, nos gustaría señalar lo que para la EAPN-RM es el hecho más relevante de lo sucedido en estos días. Tanto el Presidente de la Comunidad Autónoma como la Presidenta de la Asamblea Regional estuvieron de acuerdo en la propuesta que se les hizo de que el nuevo Estatuto de Autonomía reconozca los Derechos Sociales como Derechos Subjetivos. No se trata de una mera cuestión semántica ya que al ser reconocidos como subjetivos, los derechos dejan de estar limitados por cuestiones presupuestarias y deben ser satisfechos sin condición alguna.
El 16 de octubre, parte de la Junta Directiva se reunió con el Presidente de la CARM, Fernando López Miras, y con la Consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades, Violante Tomás. Se revisó el estado del Pacto contra la Pobreza y la Exclusión Social firmado en 2015, solicitando la elaboración de un informe semestral que incluya una memoria económica para comprobar que, efectivamente, se destina el 5% del presupuesto autonómico a la lucha contra la pobreza. Insistimos en algo que nos parece muy importante: la Ley de Renta Básica la reconoce como un derecho subjetivo y así debe ser tratada. Expusimos la conveniencia del diseño de una Estrategia Regional o Plan Regional de Lucha Contra la Pobreza que incluya medidas a medio y largo plazo de lucha contra la pobreza y la exclusión. Un plan que debe ser transversal a todas las Consejerías y que creemos debe liderar el mismo Presidente de la CARM. Igualmente, como se ha mencionado al comienzo, manifestamos la necesidad de que el nuevo Estatuto de Autonomía reconozca los Derechos Sociales como Derechos Subjetivos.
El 17 por la mañana, visitamos la Asamblea Regional con una agenda muy intensa. A las 10 horas, la Junta Directiva se reunió con la Presidenta de la Asamblea, Rosa Peñalver, a la que se le expusieron varios de los temas apuntados en el párrafo anterior. Una hora después, las personas que asistieron al III Congreso Estatal de Participación de Personas en Situación de Pobreza y Exclusión Social, celebrado recientemente en Bilbao, presentaron, en la Sala de Conferencias y ante un numeroso grupo de diputadas y diputados, las conclusiones de dicho congreso. En estas conclusiones se habló de formación, empleo y Rentas Mínimas así como de derechos, participación, dignidad y ciudadanía.
Finalmente, a las 12, el director de cine murciano Juan Manuel Chumilla-Carbajosa leyó un manifiesto contra la desigualdad a las puertas de la Asamblea. Entre otras cosas, se dijo que España y la Región de Murcia deben cumplir con los compromisos adquiridos de lucha contra la pobreza a nivel nacional y regional y que urge más inversión social para las personas en situación de pobreza y exclusión.
Gran parte del texto leído se basaba en las informaciones recogidas en el “VII Informe sobre el Estado de la Pobreza – Seguimiento del indicador de riesgo de pobreza y exclusión social en España 2008-2016” elaborado por EAPN España. En el informe se realiza el seguimiento del indicador llamado AROPE[1]. Este indicador es el que utiliza la Unión Europea, a través de la Oficina Europea de Estadística (Eurostat), para medir las personas en riesgo de pobreza y/o exclusión. En particular, el AROPE y sus componentes están calculados por el Instituto Nacional de Estadística a partir de la Encuesta de Condiciones de Vida (ECV). Para ello, la ECV sigue una metodología homologada en el conjunto de la UE, con criterios de obtención de datos y de construcción de indicadores idénticos para todos los países y cuyos resultados son recogidos por Eurostat. Son, pues, datos oficiales cuyos valores no admiten dudas y que permiten medir el estado de la pobreza y exclusión social en un país determinado, su evolución temporal y su comparación con otros países europeos. El estudio de la evolución del AROPE tiene como finalidad el seguimiento de los compromisos contraídos a nivel social por España dentro de la Estrategia 2020, en la que nuestro país asumía como objetivo reducir entre 1.400.000 y 1.500.000 (en el periodo 2009-2019) el número de personas en riesgo de pobreza y exclusión social.
El 34,8 % de la población residente en la Región de Murcia está en riesgo de pobreza y/o exclusión social en el año 2016. A pesar de la reducción experimentada en el último año, 4 puntos porcentuales menos, la tasa sigue siendo extraordinariamente elevada. Así, la cifra es 6,9 puntos porcentuales superior a la media nacional y la cuarta más alta de todas las comunidades autónomas. Además, la tasa AROPE está muy lejos de volver a los números anteriores a la crisis, pues el diferencial con respecto al 2008 se eleva a 7,3 puntos porcentuales. Nos gustaría remarcar, por la gravedad que el dato conlleva, que la tasa de pobreza extrema en la región se sitúa en el 8,1% de la población. Esto supone que estas personas deben sobrevivir con menos de 342€ mensuales. La cifra es muy elevada pues, aunque está cerca de la media nacional (1,7 puntos porcentuales superior), es la tercera más alta de todas las comunidades autónomas.
Siguiendo con los actos celebrados, por la tarde, y en colaboración con la Coordinadora de ONGs para el desarrollo de la Región de Murcia, realizamos una concentración en la plaza murciana de Santo Domingo. Acudieron representantes y participantes de las distintas entidades que forman parte de la EAPN-RM. Se realizó, dinamizada por el creador escénico Theor Román, una actividad para visibilizar la pobreza que consistió en la lectura pública, por parte de los asistentes a la concentración, de titulares de prensa sobre pobreza y la desigualdad. Para terminar, salimos de manifestación hasta el palacio de San Esteban, donde se leyó un manifiesto conjunto.
Puedes leer el manifiesto completo aquí.
[1] AROPE: At Risk Of Poverty and/or Exclusion. Una persona está en situación o riesgo de pobreza o de exclusión social cuando cumple al menos una de estas tres situaciones: a) está en situación de riesgo de pobreza (dispone de una renta por debajo del umbral de la pobreza), b) sufre privación material severa (no puede permitirse al menos cuatro de nueve ítems de consumo básico definidos a nivel europeo: ha tenido retrasos en el pago de gastos relacionados con la vivienda principal en los últimos 12 meses; no puede permitirse mantener la vivienda con una temperatura adecuada; no puede permitirse ir de vacaciones al menos una semana al año; no puede permitirse una comida de carne, pollo o pescado al menos cada dos días; no tiene capacidad para afrontar gastos imprevistos por un importe de hasta 650 €; no puede permitirse disponer de teléfono; no puede permitirse disponer de un televisor en color; no puede permitirse disponer de una lavadora; no puede permitirse disponer de un automóvil.), c) vive en un hogar con baja intensidad de trabajo (relación entre el número de meses trabajados efectivamente por todos los miembros del hogar y el número total de meses que, en teoría, podrían trabajar como máximo todas las personas en edad de trabajar del hogar).